Tradiciones navideñas
Por Lenka Kegevic
Aún estás a tiempo de crear tus propias tradiciones navideñas familiares, o de explicar la trascendencia de las que estés perpetuando de cuando eras niño o niña.
El proceso de crear una tradición puede crear mucha complicidad con los niños, muchas risas, y emociones positivas, que se recordarán año a año. Explicar lo que significa para ti la tradición que estés repitiendo de cuando tú eras niño o niña y que tus hijos puedan acercarse a conocer tu propia niñez, también genera un vínculo maravilloso: qué mejor que saber qué hacían los papás a nuestra edad!!
Puede ser algo sencillo, o más elaborado dependiendo de la edad de los niños, de las capacidad prácticas y logísticas de la familia y de la noche o mañana de Navidad, del tiempo, de las ganas…
Lo lindo es darle el sentido que cada familia decida entregarle a la Navidad y regalarse y disfrutar un tiempo tranquilo, íntimo y significativo en familia.
Aprovechamos además, de trasmitir valores familiares y crear memorias y recuerdos que los acompañaras toda la vida y ojalá, ellos replicarán cuando sean adultos también.
En mi caso, estamos en una etapa sencilla: armamos todos juntos el arbolito, los niños ponen los adornos que quedan a su altura, nosotros los más altos, no importa si el árbol se ve desordenado o recargado en alguna rama: el árbol es de ellos.
Y la noche de Navidad dejamos unas galletas, que cocinamos juntos, para el Viejito Pascuero, junto a un vaso de leche (parece que este año será cajita “para que se lo pueda llevar, mamá”). Además, a mi hijo le gusta dejarle algo saludable también, así que dejamos la fruta más rica que tengamos.
Entre mi marido y yo tenemos que hacer espacio después de la comida de 24, para que el 25 esto este parcialmente comido. Es nuestra forma de mostrar gratitud y preocupación por el Viejito Pascuero que está trabajando toda la noche por todos los niños del mundo.
Cuéntenme sus tradiciones!!! Hay cosas muy sencillas y lindas que otras familias podrías imitar. Yo les iré contando con las que me vaya topando.
Lenka Kegevic
Psicóloga Educacional UC